La Comisión Ejecutiva del PSE-EE, reunida esta tarde en una sesión extraordinaria para analizar los resultados electorales, ha manifestado su voluntad de buscar en los próximos días acuerdos que garanticen la estabilidad de las instituciones locales y forales en un escenario marcado por la pluralidad y la ausencia de mayorías absolutas.

Los Socialistas Vascos consideran que la fragmentación política es una característica determinante del espacio político en Euskadi desde hace ya décadas. El compromiso del PSE-EE para preservar esta pluralidad y, al tiempo, evitar la precariedad de las instituciones, que necesitan gobiernos fuertes, se ha concretado tras los últimos procesos electorales en un forma de hacer política que se ha visto refrendada el 26M con 190.921 votos socialistas y 27 junteros en las elecciones forales y los 181.489 votos y 228 concejales en los comicios locales.

El PSE-EE es la izquierda vasca progresista, responsable y fiable, que tiene como prioridad el progreso económico, el empleo digno, la igualdad y la cohesión social y éstas serán las máximas con las que afrontará las conversaciones con otras fuerzas. El objetivo será que las instituciones, en especial aquellas en las que se ha registrado una confianza significativa en las candidaturas socialistas, tengan estos objetivos como eje de su acción política en los próximos cuatro años.

La dirección socialista también ha valorado la victoria socialista en las elecciones europeas, que se ha concretado en el caso del PSE-EE con la elección de Eider Gardiazabal, y la resistencia que en España ha liderado el PSOE y su Secretario General, Pedro Sánchez, frente a los movimientos antieuropeistas, populistas, y partidarios de la involución.