Señora presidenta, señoras y señores apoderados y a cuantos nos visitan, egun on guztioi.

Afrontamos hoy el último Pleno de Política General de este mandato. Un mandato que comenzó tras las elecciones municipales y forales celebradas el pasado 24 de mayo de 2015 y que demostraron, claramente:

• que Bizkaia cuenta con una SOCIEDAD PLURAL y DIVER-SA

• y que los importantes retos de nuestro territorio histórico, necesitaban de una ESTABILIDAD POLÍTICA para poder afrontar-los en condiciones.
Miren, yo siempre he pensado que es importante hacer memoria, porque en esta sociedad de la inmediatez y la postverdad, tendemos a devorar muy fácilmente los recuerdos que permiten formar algo tan necesario en todas las esferas de la vida, como es el contexto. Porque para saber dónde estamos y hacia dónde vamos, debemos recordar de dónde venimos.

Pues bien, con los resultados de aquellas elecciones en la mano, todas y cada una de las distintas fuerzas políticas que hoy nos sentamos aquí, tuvimos que tomar una decisión con un contexto muy determinado y responder a una única pregunta: ¿qué podemos hacer?

• ¿Qué podíamos hacer por las cerca de 100.000 personas que, en aquel momento, por la falta de un puesto de trabajo, habían visto como -de repente- su proyecto vital, en el mejor de los casos, quedaba suspendido hasta próximo aviso... Y en muchos de esos casos, con personas mayores de 55 años y por tiempo superior a un año, que poco a poco, habían ido perdiendo toda cobertura -gracias a los recortes a los que nos sometió el Gobierno de Rajoy- y que se veían condenados al amparo de familia o amigos o a jubilarse con unas pensiones de miseria.

• O ¿qué podíamos hacer por una juventud a la que se nos invitó a soñar y a la que se nos prometió un futuro digno, próspero y estable a cambio de nuestro esfuerzo por adquirir una formación excelente y a la que, de repente, se nos condenaba a ser dependientes de nuestros padres o a marchar lejos de nuestro hogar en busca de un empleo, en el mejor de los casos, precario...

• ¿Qué podíamos hacer por el empleo, por una industria y un comercio con datos preocupantes, por una Bizkaia que no estaba pasando sus mejores momentos?
En definitiva, todos tuvimos que plantearnos ¿Qué podíamos hacer por tratar de lograr la recuperación económica y, lo que es más importante, por trasladarla a la ciudadanía de Bizkaia (a sus bolsillos) y recuperar, para después incrementar, los niveles de empleo, de protección social y servicios públicos, que el tsunami de la crisis económica se había llevado por delante?

Y los Socialistas, como decía, vimos claro que la ciudadanía de Bizkaia nos estaba pidiendo que todos hiciéramos un esfuerzo para que, a pesar de las discrepancias, buscáramos soluciones a los

problemas que, al fin y al cabo, nos afectaban a todos los vizcaínos y vizcaínas, con independencia del partido político al que hubiéramos votado.

Yo ya sé que a otras formaciones políticas les suele dar vértigo el acuerdo (-lo hemos podido ver en muchas ocasiones a lo largo de estos años-.) Pero no al socialismo. Al contrario. El PARTIDO SOCIALISTA nunca ha dudado en asumir la responsabilidad que la sociedad demanda de nosotros. Hemos estado en Gobier-nos y en oposición. Pero donde siempre ha estado el PARTIDO SOCIALISTA es en todos los acuerdos entre diferentes, que han hecho de nuestro país lo que es y que han construido nuestro sistema de bienestar y protección social...

Y sobre aquella base, tras días y días de reuniones, cruces de docu-mentos y propuestas -que algunos de quienes hoy estamos aquí sentados vivimos en primera persona-, fuimos capaces de consensuar -a pesar de nuestras muchas diferencias ideológicas- un Acuerdo Programático y de Gobierno para los cuatro años que terminan en este curso 2018-2019.

Un acuerdo basado en 6 ejes irrenunciables que han presidido las actuaciones de este Gobierno Foral bicolor:

1. Reactivación Económica y Empleo.
2. Promoción de la Igualdad y defensa de los servicios públicos.
3. Fiscalidad.
4. La Transparencia, la eficiencia y la cercanía de las instituciones públicas.
5. El desarrollo Comarcal.
6. Y la Movilidad Sostenible.

Y en efecto, señor Rementeria, sólo con lo señalado en ese acuerdo programático, que a lo largo de estos años se ha ido materializando en actuaciones concretas, era ya muy difícil que alguien nos pasara por la izquierda, porque gran parte de las reivindicaciones de la izquierda vizcaína, las habíamos incorporado a ese acuerdo que junto a su partido firmamos el Partido Socialista.

Porque, me lo han oído alguna vez más en esta misma tribuna, cuando me he referido a nuestra mano tendida para abordar acuerdos amplios entre los distintos grupos. Cuando uno quiere ser útil a las personas que le han votado, no es malo recordar un Principio básico de realidad política: "si la ciudadanía no te ha dado votos suficientes para llevar a cabo todo tu programa electoral, utiliza la fuerza de los votos conseguidos para condicionar la acción de gobierno para que se parezca lo más posible a tu programa". Y eso hemos hecho.

Miren, el Diputado General ha utilizado hoy aquí un concepto identificador: el de la normalidad, que por supuesto compartimos. Pero yo voy a poner otro encima de la mesa: la previsibilidad.

En tiempos tan convulsos como los que hemos vivido y estamos viviendo, la previsibilidad es también un valor que la ciudadanía aprecia. Previsibilidad es confianza. Es que la ciudadanía tenga certezas sobre lo que se va a hacer.

Y por eso entenderán que, para nosotros, en esa revisión de las actuaciones de este Gobierno que han contribuido a mejorar Bizkaia, adquieren especial relevancia todas aquellas que los Socialistas vinimos proponiendo, impulsando o incluso apoyando de otros grupos, años antes, desde la oposición y que, sin embargo, no se han

convertido en una realidad hasta que las incorporamos al programa de Gobierno de hace tres años.

Y es que, como decía el Diputado General, "la normalidad a veces pasa desapercibida"... Sin embargo, lo cierto es que hoy, 24 de Septiembre de 2018:

• Bizkaia cuenta con una Norma Foral de Transparencia. Una respuesta a las muchas reclamaciones de transparencia que los distintos grupos vinimos exigiendo desde la oposición y que hacemos realidad cuando gobernamos. Y que lo hemos hecho con intensa negociación, con la incorporación de aportaciones y con un objetivo: consagrar el derecho de acceso a la información de la ciudadanía de Bizkaia.

• Bizkaia cuenta con altos cargos sin privilegios. Simplemen-te, desde hace tres años no hay cesantías, tal y como se demanda-ba desde la oposición.

• Bizkaia cuenta con una propuesta de regulación de incom-patibibilidades y conflicto de intereses. Queremos cerrar el círculo que comenzamos a trazar los Socialistas desde la oposición, en el Parlamento Vasco. En 2014, aprobamos una Ley marco que debía ser la guía en el resto de instituciones, para prevenir e intentar evitar fraudes desde la Administración, para sancionar a quien incumpla, para cerrar la puerta a quienes pretendan engañar a esa Administra-ción, que somos todos.

Creo que el mensaje debe ser claro: "la inmensa mayoría de quienes estamos en política no somos unos jetas y se lo queremos poner muy difícil a quienes lo sean y quieran estar en política".

• Bizkaia cuenta con la Autoridad de la Movilidad, esa entidad que, como alguien dijo en algún medio de comunicación, "de tanto esperarla y querer ponerla en marcha se había convertido en un mito entre los responsables del sector del Transporte en Bizkaia". Ha habido que esperar un cuarto de siglo y es una realidad bajo el impulso de mi compañero Vicente Reyes, fruto del esfuerzo y la colaboración también con el Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Bilbao. Un órgano que tiene por objetivo optimizar recursos, evitar duplicidades y propiciar una cohesión territorial y social más efectiva, así como avanzar en el sistema de integración tarifaria.

• Bizkaia cuenta con una trinchera menos: la que atravesaba Ermua y que se alivia con su nueva variante. El último rincón atravesado por una nacional y su intenso tráfico. Una larga pelea vecinal, un liderazgo claro desde la alcaldía, un esfuerzo intenso desde la oposición constructiva de los Socialistas, en Bizkaia y Euskadi, a través de los presupuestos...

• Bizkaia cuenta con una propuesta unánime para sus comarcas desfavorecidas: Margen Izquierda, Zona Minera, Enkarterri saben que todos los partidos han decidido sumar esfuerzos y alinear a ayuntamientos, diputación, Gobierno vasco, Gobierno de España y Unión Europea para que no se conviertan en los últimos olvidados
Y, en todas las áreas, podría seguir poniendo muchos más ejemplos que hasta esta legislatura no fueron posibles y, tras el Acuerdo

Programático y de Gobierno que suscribimos los Socialistas en Bizkaia, este Gobierno bicolor SÍ ha convertido en una realidad... pero, en síntesis, el nexo común es precisamente esa "previsibilidad" que pueden tener los ciudadanos y ciudadanas de Bizkaia de que los Socialistas trabajaremos siempre con un único fin: lograr mayores cotas de bienestar e igualdad y la esperanza cierta de una vida mejor.

Y en ese trabajo conjunto que hemos desarrollado los Socialistas y PNV en este Gobierno Foral, coincidimos con el Diputado General en que si algo hemos demostrado es tener iniciativa.

• Iniciativa para, como decíamos antes, rescatar ideas y mejorar proyectos que con otros Gobiernos nunca fueron posibles.

• Iniciativa para hacer frente a los retos que teníamos por delan-te.

• Y, fundamentalmente, iniciativa para no defraudar a una sociedad que, lógicamente, espera de nosotros algo tan simple -y tan complicado- como que solucionemos sus problemas -no que les creemos alguno más- y que al finalizar el mandato dejemos una Bizkaia mejor que la que encontramos.

Y es verdad, como ya se ha dicho, que evidentemente ha podido haber errores, de hecho, claro que los ha habido; y también es verdad que habrá muchas cosas que mejorar, claro que sí... pero, sinceramen-te, creo que hoy nadie puede negar, con datos objetivos, que este Gobierno Foral en el que nos embarcamos los

socialistas, devolverá a los vizcaínos y vizcaínas una Bizkaia mejor que la que le entregaron.

CON RESPECTO A LA REACTIVACIÓN ECONÓMICA Y EL EMPLEO

... desde el Inicio de la Legislatura el paro ha disminuido en Bizkaia un 17,4% y creo que es una buena noticia incuestionable y que a todos nos alegra.

Sin embargo, a pesar de los buenos datos globales que hemos conseguido, para el PSE-EE (PSOE) siguen siendo una prioridad cada una de esas 71.376 personas que aún están en el paro. Por eso, nos parece acertado seguir incidiendo desde el Departamento de Empleo, Inclusión Social e Igualdad de la Diputación de Bizkaia, en las experiencias y estrategias novedosas que nos han llevado a estos buenos datos, con acciones a favor del Empleo que, cada año, están llegando a más de 10.000 personas: Lanzaderas de Empleo (con esos altísimos niveles de inserción laboral que se han conseguido); o con Programas que apuestan por puestos de trabajo más estables y mejor remunerados como los Programas de Empleo Joven; de Autoempleo; de Empleo para personas con dificultades de inserción laboral... etc.

Y nuestra apuesta sigue siendo la de un Empleo de Calidad. Porque es verdad que estamos viendo cómo aumentan las cifras de negocio de las empresas, cómo aumentan sus inversiones e incluso cómo aumentan sus plantillas y, por tanto el empleo. Baina kontua ez da soilik langabezia jaistea, baizik eta enpleguaren kalitatea bermatzea ere. Tenemos que recuperar empleo, sí, pero empleo con derechos, empleo de calidad.

Nos preocupa también la precariedad que va tradicionalmente aparejada a un mercado, el turístico, que ya es de hecho una industria de primer orden en nuestro Territorio Histórico. Si queremos un turismo de calidad, el empleo que genere, también debe ser de calidad.

Y es verdad que sufrimos las consecuencias aún de la precariedad que permitió la última reforma laboral de 2012, y que el Gobierno de Pedro Sánchez está empeñado en corregir junto a otros grupos.

Pero también es verdad, que tras ya cuatro años de recuperación económica apenas se ha notado en los salarios de los trabajadores. Apenas 33 euros, y porque se han abonado atrasos. La mejora de la economía debe llegar de una vez a los bolsillos de todas y todos, debe ser fruto de la negociación colectiva y debe ser acompañada por las instituciones.

Por lo tanto, señor Diputado General, tenemos un reto que no me cabe ninguna duda que compartimos: conseguir un empleo de calidad para Bizkaia. Y también creemos que para ello es bueno apostar por incrementar el peso de nuestro sector industrial, de sectores como la automoción, la aeronáutica y la energía, y cada vez más esos nuevos sectores emergentes como las biociencias y la salud, las TICs y las industrias creativas y culturales, nutriéndolo con el excelente sistema científico-tecnológico, con las universidades, centros de investigación y centros tecnológicos punteros que precisa Bizkaia.

Y es verdad que nuestro tejido industrial y empresarial ha hecho un gran esfuerzo por sobrevivir a la crisis y es digno de reconocimiento,

pero los Socialistas creemos que con la recuperación que están manifestando, es hora de repetir una exigencia que este Gobierno foral ya hizo suya. Desde las instituciones estuvimos y estamos ahí apoyando al tejido empresarial e industrial, como no puede ser de otra manera, pero es hora de que las empresas devuelvan a los trabaja-dores el poder adquisitivo que perdieron durante la crisis. Hablando claro: es hora de que las empresas suban el sueldo a sus trabajadores y trabajadoras.

En nuestra opinión, ese es el camino que permite salarios dignos y cotizaciones suficientes para garantizar pensiones dignas desde el sistema público. Es un elemento que nos ha unido a las miles de personas que hemos compartido en las calles el movimiento de nuestros mayores. Y es un elemento que cuenta desde junio, con el nuevo gobierno, con la oportunidad de corregir el empobrecimiento padecido en estos años y al que se condenaba a los pensionistas en el futuro.

Ahora es el momento de dar estabilidad a ese sistema público. Lo tenemos que hacer quienes hemos propiciado el Gobierno de Pedro Sánchez, el que va a abrir esa puerta.

Y en este sentido, creo que es importante hacer una reflexión y una advertencia. La apuesta de los Socialistas en esta materia es blindar el sistema público de pensiones.

El Diputado General ha hecho mención hoy también "a la necesidad de complementar nuestro actual sistema de prestaciones con una EPSV de empleo para todos los trabajadores/as de Bizkaia". Pues bien, los Socialistas creemos que la necesidad real es la de garanti-zar el sistema Público de Pensiones y abordar las reformas que para ello sean necesarias. Esa debe ser la prioridad, acordar en el pacto de Toledo nuevas fuentes de ingresos para el sistema público, porque es lo que garantiza los ingresos dignos de lo que habla el artículo 50 de la Constitución.

Por eso creo, como ya pensamos en Julio cuando lo comentó en su discurso de San Ignacio, que este anuncio no se hizo ni en el lugar ni en el momento adecuado. Las EPSV de empresa son fruto de la negociación colectiva, de la decisión que adopten los trabajadores para diferir parte de su salario. Si es así, es entonces cuando las institucio-nes deben acompañar. Para eso sirve el diálogo social tripartito, para concertar a instituciones, representantes de trabajadores/as y de empresas. Y nosotros, queremos seguir respetando la Negociación Colectiva.

CON RESPECTO A LA PROMOCIÓN DE LA IGUALDAD Y DEFENSA DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS

Nuestra constante a lo largo de esta legislatura ha sido precisamente defender los servicios públicos de calidad y mejorar su eficiencia social, por entender que son necesarios para atender a las necesidades de la ciudadanía y un instrumento imprescindible para garantizar la igualdad de todos.

Respondiendo a estos compromisos de legislatura, las personas han sido siempre el eje prioritario en los presupuestos de todo el mandato, destinando en el último ejercicio a este fin más de 525 millones de euros, de los 1.193 millones de Euros disponibles, a través principal-mente de acciones dirigidas la igualdad de oportunidades y a los derechos ciudadanos, inclusión, igualdad, cooperación, diversidad, infancia, personas mayores, discapacidad y dependencia.

Las políticas sociales que necesita Bizkaia deben perseguir la defensa de los derechos humanos, la dignidad de todas las personas, la promoción de la justicia social, la solidaridad y la construcción de una sociedad inclusiva en la que todas las personas, independientemente de su origen o condición, puedan desarrollar su proyecto de vida de forma plena y digna.

Y en este sentido creo que es importante destacar que desde el Departamento de la Diputada Teresa Laespada hemos introducido una nueva mirada a la política de Inclusión. No solo se trata, que también, de garantizar un nivel de vida de las personas en situación de dignidad, sino de aportar las herramientas para que puedan transfor-mar su realidad y reconstruir su proyecto de vida. Y para eso, es fundamental el trabajo de inclusión pero también de empleo y por su puesto la mirada de género.

Hemos aprobado también el Plan Foral de Cooperación apostan-do por la Cooperación descentralizada incorporando nuevos ejes de actuación, dando prioridad a la educación para la transformación social. Y teniendo una mirada especial y específica al continente africano. Hemos impulsado, y logrado, que el 20% de los proyectos de Cooperación se establezcan en África.

Y, por supuesto, creo que es importante destacar la Apuesta com-partida que hemos realizado por la Igualdad como una política transversal al conjunto de las actuaciones públicas.

Creemos sinceramente que, en esta Cámara, nos une nuestra volun-tad decidida de propiciar con todas las herramientas que estén en nuestras manos que las mujeres se sitúen en pie de igualdad en todos los ámbitos políticos, económicos y sociales. El socialismo vasco se comprometió en campaña a sacar a la mujer del rincón de la protec-ción y ubicarla en la cabina de mando, por razones de igualdad y porque es un inmenso capital que Bizkaia no se puede permitir desperdiciar para su progreso. Y así lo reflejamos en el acuerdo de Gobierno.

La aprobación, hace escasos meses, de la Norma Foral de Igualdad es un hito histórico en sí mismo, pero sobre todo supone la obligación de hacer las cosas de una nueva manera. Supone poner la mirada de Igualdad en todo.

• Una Norma que nació de un proceso participativo amplio y que ha sido enriquecida con las aportaciones de los grupos de esta Cámara (98 enmiendas incorporadas);

• una Norma que tiene muy claros sus objetivos: Igualdad de oportunidades; Igualdad de trato; integración de la perspectiva de género en las políticas públicas y privadas; respeto a la diversidad y la diferencia; eliminación de roles y estereotipos; representación equilibrada; colaboración y coordinación...;

• una Norma que define funciones, competencias y una organi-zación novedosa, que vuelve a hacer de la participación su guía;

• y una Norma que, además de letra, garantiza acciones y recur-sos económicos y humanos para hacerse realidad.

El reto y el compromiso de la Diputación Foral de Bizkaia para el año 2019 y próximos años debe ser, precisamente, el desarrollo de la Norma Foral de Igualdad, iniciando los procesos participativos para desarrollar las estructuras de colaboración que la Norma Foral establece; reformulando la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de la Diputación para la creación de nuevos puestos de personal técnico de Igualdad; adecuando los instrumentos forales de contratación, subvenciones, y procedimiento de elaboración de disposiciones de carácter general a las obligaciones que establece la Norma y constru-yendo el Plan de Igualdad 2020-2023 tomando como referencia la Norma Foral de Igualdad.

Como defendió en esta misma Tribuna la Diputada Teresa Laespada "con esta Norma ponemos en el primer punto de la agenda de la Diputación las políticas de Igualdad. Situamos en el plano normativo la necesidad de aplicar la perspectiva de género en las organizaciones públicas y privadas y las garantizamos a través de la aportación de los recursos necesarios".

Por otra parte, los Socialistas nos conjuramos en que esta legislatura debía recuperar la cultura política que alumbraron la Euskadi y la Bizkaia que hemos heredado. La que reconoce su pluralidad y está orgullosa porque los diferentes nos pongamos de acuerdo para garantizar una sociedad de hombres y mujeres libres e iguales, para garantizar los servicios públicos que hacen posibles los derechos de todos y todas, capaz de transformarse, de prepararse para los retos del futuro.

Una Bizkaia que quiere acoger a quienes vienen buscando una oportunidad de otras tierras. Que necesitan que nos coordinemos con eficacia todas las instituciones, porque les necesitamos. Porque la inmigración no es un problema, es un reto al que queremos dar respuesta. No queremos hablar de cuotas, queremos hablar de solidaridad.

Este verano los medios de comunicación y la labor de las institucio-nes ha estado ocupada y preocupada por la llegada notable de personas migrantes-transeúntes a Euskadi. Un fenómeno, el migrato-rio, que existe desde que existe el ser humano. Y que no dejará de existir.

Por eso no podemos compartir que lo que hemos visto en estos últimos meses sea un problema. Ni que nuestra acogida dependa de ayudas. Quienes vienen lo hacen buscando una nueva oportunidad, no nuestras ayudas. No quieren beneficencia, quieren iguales derechos y obligaciones. No quieren caridad, quieren formar parte de nuestra sociedad.

Y la oportunidad que buscan esas personas en nuestra tierra es una enorme oportunidad también para Bizkaia, tierra desde siempre de inmigrantes y emigrantes, que necesita salir y recibir.

Y los Socialistas nos alegramos mucho de ser atractivos, para que el ongi etorri sea cierto tanto para las personas migrantes, como para las turistas que nos visitan.

Pero es que hemos demostrado que sabemos hacerlo. El 18 de junio se recibió el primer contingente de personas en tránsito y el 29 de junio se puso en funcionamiento el primer dispositivo en Bilbao de forma transitoria para resolver la cuestión y se hizo de la mano de la Diputación Foral de Bizkaia, iniciativa que lideró nuestra Diputada socialista y que instó al ayuntamiento de Bilbao y al propio Gobierno
Vasco a sumar sus esfuerzos para resolver la situación por unos días de las personas que llegaban a Euskadi y que necesitaban un lugar para descansar en su tránsito hacia Europa.

Eso se ha hecho y se ha hecho bien.

Pero los Socialistas creemos que debemos abrir el debate sosegado entre todas las instituciones, partidos y colectivos, de cómo vamos a hacer para realizar un proceso de integración para aquellos que vienen expresamente a quedarse en Euskadi, entre nosotros. Ahí, el PSE-EE va a arrimar el hombro siempre. Creemos que sin pausa, debemos ponernos a trabajar en elaborar un Plan Interinstitucional de Inmigra-ción que resuelva la situación de las personas que vienen a establecer-se con nosotros.

Más allá de la búsqueda de la cobertura de las necesidades básicas, debemos dotarles de los instrumentos necesarios para que puedan desarrollar una vida autónoma; aprendizaje intensivo de los idiomas, capacitación profesional para adecuarse a las necesidades del mercado laboral, activación laboral, etc. Y eso implica que pongamos recursos para ello y para todos. También para los menores. Bienvenidos sean. Dada la tasa de demografía que tenemos, creemos que sería una buena política de país, que asumamos con normalidad y garantías, el trabajo que debemos hacer las Diputaciones con los menores y buscar el mejor modo de que nosotros contribuyamos a su desarrollo y que busquemos el camino para que también ellos desarrollen entre nosotros su propio proyecto de vida y se queden. Son jóvenes que necesitamos. No los veamos como un problema, sino como una oportunidad para hacerlo bien.

CON RESPECTO A LA FISCALIDAD

Todos sabemos que para lograr estos y otros objetivos, necesitamos recursos. Para eso queremos los impuestos. Y nuestra reflexión de fiscalidad siempre ha sido:

• ¿Qué servicios queremos tener?,
• ¿Cómo los podemos pagar?,
• Que pague todo el mundo y
• Que pague más quien más tiene.
Es decir, eficiencia y proporcionalidad para garantizar la redistribución de la riqueza de forma justa.
Esa fue la apuesta que impulsamos, lideramos y acordamos en el año 2013 y en la revisión que hemos hecho este mismo año. Y aunque el debate está fresco, porque es de hace escasos meses, les volveré a decir que frente a quienes siempre -ya desde 2013- han puesto en duda los beneficios de esta reforma fiscal hay una simple respuesta: los datos.
Primero conseguimos frenar el vaciamiento de las arcas que ponían en riesgo nuestros servicios públicos. Y ahora hablamos ya de que la recaudación fiscal vasca se dispara y puede superar por primera vez los 15.000 millones...
Lo estamos viendo cada ejercicio: la reforma fiscal, unida a las múltiples medidas adoptadas contra el fraude y la elusión fiscal, han sido y son lo que ha permitido sostener nuestro estado de bienestar. Poco más se puede decir.

CON RESPECTO A LA TRANSPARENCIA, LA EFICIEN-CIA Y LA CERCANÍA DE LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS Y EL DESARROLLO COMARCAL

A lo largo de este mandato hemos avanzado en la extensión de oficinas por diferentes Comarcas y ya hemos hablado de nuestra apuesta por la Transparencia y la búsqueda de soluciones para comarcas con problemas específicos como Ezkerraldea, Enkarterri y Meatzaldea. Cercanía con personas y municipios y comarcas.
Y creemos, sinceramente, que otra forma de ofrecer cercanía a lo que la ciudadanía demanda de nosotros, es la incorporación de cláusulas sociales y medioambientales en la contratación pública, añadiendo al concepto de eficiencia económica, el de eficiencia social.

CON RESPECTO A LA MOVILIDAD SOSTENIBLE

Además de la creación de la Autoridad de la Movilidad de Bizkaia, a la que ya hemos hecho referencia, mantenemos como objetivo prioritario el desarrollo de un modelo de movilidad sostenible capaz de satisfacer las necesidades de una sociedad de moverse libremente, una movilidad sostenible social, económica y medioam-bientalmente. Y como herramienta privilegiada para el análisis de nuestra realidad contaremos con el Plan Estratégico del Transporte Público en Bizkaia 2018 - 2028, que analizará entre otros aspectos las posibles carencias, solapamientos o duplicidades de los distintos modos de transporte.
Pero cuando los Socialistas hablamos de transporte no sólo habla-mos de que los autobuses sean puntuales, de que haya más paradas, más frecuencias, que también. Para el Partido Socialista, el transporte es un factor de cohesión e igualdad. Porque esa puntualidad, esas frecuencias, esas paradas lo que suponen es que garantizamos el derecho de los estudiantes de acceder a la universidad, de los mayores a tener una vida autónoma o de las mujeres a llegar seguras a sus casas (aplicando a Bizkaibus las paradas nocturnas a demanda).

Voy terminando, señoras y señores.

Como he dicho al comienzo de mi intervención, cuando firmamos el acuerdo que permitió el inicio de este Gobierno Foral, lo hicimos conscientes de que la sociedad vizcaína exigía respuestas a los grandes retos a los que nos enfrentamos.

Bizkaia afronta unos años cruciales para su futuro como sociedad y como Territorio. Y Socialistas y jeltzales desde nuestras muchas diferencias ofrecimos una hoja de ruta a una sociedad que demandaba soluciones y no broncas, ni artificios.
Los Socialistas estamos empeñados en el cumplimiento completo y cabal del acuerdo de gobierno y de los principios que lo rigen, pero por una simple razón: estamos absolutamente convencidos de que esa hoja de ruta -y no otras- es la que de verdad aportará soluciones a los problemas reales que afectan a la ciudadanía vizcaína.
Y es que, cuando los Socialistas estamos en las instituciones, la ciudadanía lo nota.
Decía el Lehendakari Ramón Rubial "en Democracia, la revo-lución, se hace en el Boletín Oficial". Con ese objetivo revolucio-nario los Socialistas iniciamos la legislatura y nuestra andadura en el Gobierno de Bizkaia y, como he dicho, ya sabemos que vamos a dejar una Bizkaia mejor que la que recibimos: más igual, más mestiza, más transparente, con más derechos y servicios públicos. Un trabajo del que el Socialismo se siente orgulloso y que nos permite pensar en un futuro mejor, con nuevos retos a los que los vizcaínos y vizcaínas también podremos hacer frente, siempre que se ofrezcan certezas y seguridades, frente a las incertidumbres y temeridades que otros nos quieren plantear.
Besterikez; eskerrik asko.